¿Qué se puede hacer para ahorrar más en el día a día? La clave está en clasificar los gastos en variables o fijos. Entre los que se podrían considerar como gastos fijos están la luz, el agua, el teléfono, etc. En cuanto a los gastos variables podríamos encontrar la compra de ropa, reparaciones, etc. Un tercer grupo de gastos serían aquellos pagos periódicos, como el caso de los seguros o las vacaciones. Es importante reducir los gastos superfluos que se hacen en el día a día.
