Los Tipos: Oficiales, Legales y de Mercado ¿Cuáles son? ¿Cómo funcionan?

Política Monetaria

Comparte este post

¿Alguna vez has oído hablar de términos como «interés legal», «interés de demora», «Euribor» o «€STR» y te has sentido perdido en un mar de jerga financiera? Si tu respuesta es sí, este artículo está hecho a tu medida.

Cada día, nuestra economía está moldeada por diferentes tipos de intereses y tasas que, aunque nos resulten extrañas o complicadas, juegan un papel esencial en nuestras vidas cotidianas. Desde la tasa que se aplica a un préstamo hasta la política monetaria de las grandes instituciones, todo tiene un impacto en nuestro día a día.

En este artículo, te llevaremos de la mano a través de este territorio financiero aparentemente inexplorado. Vamos a explicar de una forma clara y concisa qué significan todos estos términos, por qué son importantes, y cómo afectan tu vida diaria.

Hablaremos sobre los tipos de interés legales y de demora, y desentrañaremos las políticas monetarias del Banco Central Europeo. Además, nos adentraremos en las tasas del mercado, como el Euribor y €STR, y te mostraremos cómo estos índices están más conectados con tu vida de lo que podrías pensar.

El interés legal es un tipo establecido y regulado por la ley que cumple varias funciones importantes en el mundo financiero y legal. Su aplicación más notable es como medio de indemnización de daños y perjuicios en caso de impago, generalmente en operaciones comerciales cuando no se ha acordado previamente un tipo de interés específico o en supuestos de indemnización judicial.

De esta forma, sirve como mecanismo de compensación por la percepción de cantidades monetarias en momentos temporales más tardíos que cuando deberían haberse producido.

Además, el interés legal también se utiliza como punto de referencia en una serie de normas legales y acuerdos contractuales. Por ejemplo, puede formar parte de las cláusulas en contratos de préstamos o acuerdos de pago, o actuar como tasa base para ciertas operaciones.

Desde el año 1987, en España, la tasa de interés legal es determinada anualmente por la Ley de Presupuestos Generales del Estado. Cada año, la tasa se revisa y se ajusta en función de una serie de factores económicos y financieros, lo que permite que refleje las condiciones económicas actuales. En el siguiente gráfico puedes ver cómo ha variado dicha tasa desde 1995:

En la virtualización, insertar el Código de Flourish en el post para hacer el gráfico interactivo:

Interés de demora

El interés de demora es un concepto que puede parecer complicado, pero en realidad, es una forma que tiene la Administración para asegurarse de que todos paguemos los impuestos a tiempo y de la manera correcta.

La forma más sencilla de verlo es como una especie de «multa» o «sanción» que se te aplica si cometes ciertos errores o retrasos en tus obligaciones tributarias.

Así, este interés actúa como un incentivo para que realices tus pagos y presentaciones correctamente y a tiempo. Si no lo haces, tendrás que pagar un poco más, como una especie de compensación por el retraso. Es una forma de asegurar que todas las personas estén en igualdad de condiciones y que nadie pueda beneficiarse de retrasar sus pagos o de cometer errores en su declaración de impuestos.

El interés de demora se puede aplicar en diversas situaciones. Por ejemplo, si tienes que presentar una declaración de impuestos y no la presentas a tiempo, o si la presentas pero contiene errores. Además, si has recibido un reembolso de impuestos que no deberías haber recibido, también te pueden exigir que pagues el interés de demora sobre la cantidad que no te corresponde.

Esta tasa de este interés se calcula tomando como base el interés legal actual, aumentado en un 25%. Sin embargo, la Ley de Presupuestos Generales del Estado puede establecer un porcentaje diferente. En 2023, esta cifra es del 4,0625%, cumpliendo con esa definición del interés legal aumentado.

El interés de demora se aplica sin previo aviso por parte de la Administración, por lo que es crucial cumplir con las obligaciones tributarias en tiempo y forma para evitar costes adicionales.

Los tipos de referencia: el mercado interbancario y el Euribor

El mercado interbancario es un mercado exclusivo para entidades financieras y el banco central, donde estas instituciones negocian operaciones de depósito/financiación para movilizar la liquidez del sistema bancario. Aunque es un mercado cerrado (no todo el mundo puede operar en él), su tamaño e importancia hacen que sus operaciones sean significativas.

Este mercado es esencial para el sistema financiero global, ya que permite mover dinero, equilibra las tasas de cambio y suministra fondos a corto plazo a los bancos, evitando shocks de liquidez que podrían dañar significativamente la confianza de los usuarios en el sistema bancario.

A través de las operaciones realizadas en este mercado y su coste, se establecen los llamados tipos de referencia, tipos de interés representativos del coste del dinero extraídos a partir del interés exigido o pagado por los propios bancos con respecto a otras entidades.

Existen múltiples tasas de referencia que capturan el coste de estas transacciones, siendo particularmente importantes en el contexto europeo el Euribor y el €STR.

El Euribor, abreviatura de Euro Interbank Offered Rate, es una tasa promedio basada en las transacciones de un grupo seleccionado de bancos europeos en el mercado interbancario que superan los 10 millones de euros. Solo se considera el 70% de las transacciones en el medio, descartando las tasas más altas y bajas (el 15% por arriba y por abajo se eliminan del cálculo). Esta tasa puede ser calculada para varios períodos, dependiendo de las transacciones que se incluyan en su cálculo según su vencimiento. Actualmente, el Euribor se calcula para 5 referencias: 1 semana, 1 mes, 3 meses, 6 meses y 12 meses.

El €STR, abreviatura de €uro Short-Term Rate, es una tasa interbancaria para transacciones de un día. Se calcula de manera parecida al Euribor, pero solo se considera un 50% de las transacciones, descartando el 25% de los tipos más altos y el 25% de los más bajos. Otra salvedad del €STR es que sólo se calcula con operaciones de 1 día de vencimiento, por lo que sirve como referencia para operaciones a muy corto plazo.

Estas tasas son utilizadas como referencia para determinar el costo de varios productos financieros, como préstamos e hipotecas. Por ejemplo, en España, aproximadamente el 70% de las hipotecas siguen referenciadas a tipos variables como el Euribor, lo que resalta la importancia de entender cómo el comportamiento de estos tipos afecta de forma crucial a nuestra renta disponible.

Los tipos oficiales: la política monetaria del BCE

El Banco Central Europeo (BCE) es responsable de establecer la política monetaria en la zona euro. Actúa como el “banco de los bancos” para toda la Unión Monetaria, lo que le permite definir de forma efectiva cómo de caro o barato le presta el dinero a las diferentes entidades bancarias.

El BCE utiliza esta herramienta, conocida como los tipos oficiales, como una de sus principales armas para definir la política monetaria y ayudar a la economía en momentos de recesión o de inflación excesiva. En concreto, ¡el BCE establece tres tipos de interés oficiales, cada uno con un propósito y efecto distintos en el mercado interbancario:

  • La tasa de interés de las operaciones principales de financiación (MRO). Es el precio habitual para la financiación que los bancos reciben del BCE. Cuando es alta, los préstamos son más costosos para los bancos, lo que reduce su disposición a prestar y, por lo tanto, disminuye la liquidez en el mercado interbancario.

Sirve como el principal mecanismo de transmisión, ya que genera un impacto directo en la voluntad de los diferentes bancos de ofrecer crédito y el interés que solicitarán por él.

  • La tasa de interés de la facilidad marginal de crédito. Es la tasa que los bancos deben pagar si necesitan pedir prestado del BCE fuera de las operaciones de financiación regulares, generalmente en casos de emergencia y/o desajustes puntuales.

Se aplica sólo a operaciones a muy corto plazo, de tan sólo un día y cuando es alta, disuade a los bancos de tomar préstamos de emergencia. Esto les incita a ser más conservadores en la concesión de créditos, lo que reduce la liquidez, les hace menos propensos a conceder financiación a clientes menos solventes y aumenta el interés que los bancos repercuten a los clientes.

En la práctica, esta tasa suele servir como techo para los tipos interbancarios, ya que cualquier banco puede obtener dinero a esta tasa del BCE, por lo que no estarían dispuestos a pagar un coste mayor en el mercado.

  • La tasa de interés de la facilidad de depósito. Es la tasa que el BCE paga a los bancos por los fondos que depositan en él. Al igual que la facilidad marginal de crédito, se refiere a la remuneración de operaciones a un solo día, por lo que es útil para remunerar a los bancos que tienen excesos de liquidez puntuales.

Cuando esta tasa es alta, alienta a los bancos a depositar más fondos en el BCE, ya que se trata de una operación mucho más segura que prestar el dinero a otro banco. Por ello, los tipos altos reducen la cantidad de fondos disponibles para préstamos en el mercado interbancario.

En la práctica, sirve como un tipo mínimo para los tipos interbancarios, ya que, como todas las entidades pueden ganar al menos esta tasa por su dinero y sin correr ningún riesgo, éste será el precio mínimo al que estarán dispuestas a dar sus fondos a otros bancos en el mercado. Como vemos, estas tasas permiten al BCE ejercer una fuerte influencia en las operaciones del mercado interbancario, en lo que se conoce como una política de pasillo, ya que establecen de facto un tipo mínimo (fac. marginal de depósito) y un tipo máximo (fac. marginal de crédito) para nivelar la fluctuación en el mercado. En el siguiente gráfico puedes ver con todo detalle el funcionamiento de ese pasillo y cómo los tipos interbancarios se han localizado casi en todo momento entre los tipos del BCE:

En la virtualización, insertar el Código de Flourish en el post para hacer el gráfico interactivo:

Entender los diferentes tipos de interés (legal, de referencia u oficiales) que hay en el mundo financiero no es solo una necesidad para los expertos financieros, sino también para cualquier persona que quiera tomar decisiones económicas informadas.

Estos conceptos afectan de forma directa al coste de los préstamos, la economía en general y, en última instancia, nuestra vida cotidiana. Ya seas un emprendedor, un inversor o simplemente un ciudadano preocupado por su economía personal, familiarizarte con estos términos te permitirá moverte con mayor soltura en el mundo financiero y comprender mejor qué está pasando a nuestro alrededor.

Prof. Julián Óscar Hernández Florindo

Formador de Finanzas para Mortales

Doctor en Economía de la Empresa y Finanzas

Disfruta de más contenido 

Actualiza tu navegador

Esta versión de tu navegador no permite visualizar correctamente la página. Para que tengas una buena experiencia y mejor seguridad, por favor descarga cualquiera de los siguientes navegadores: Chrome, Edge, Mozilla Firefox