Es la imposibilidad de pagar las deudas contraídas por un individuo o institución.
Frente a la quiebra forzosa, la bancarrota supone la ruina económica con el consiguiente descrédito derivado de una falta de medios económicos para hacer frente a las obligaciones financieras. Aunque en ambos casos supone la cesación de la actividad del negocio, la bancarrota significa su desaparición por falta de capacidad o de deseo de continuarlo. La utilización del término bancarrota tiene significado peyorativo puesto que se imputa una falta o fraude con el resultado de menoscabar su fama o estima.
En la época antigua y en determinadas culturas la imposibilidad de pagar las deudas se podía saldar con trabajo físico (esclavitud) cuya duración estaba limitada en algunas religiones.