Hablamos de déficit cuando, al realizar un presupuesto, tenemos mayor cantidad en gastos que el dinero que ingresamos, o lo que es lo mismo, en un presupuesto personal o familiar, cuando no llegamos a final de mes… En este caso, se trataría de ver qué gastos (seguramente de los variables y ocasionales) no son estrictamente necesarios para ver si podemos recortar de algún lado.
En definitiva, no solo en la elaboración de un presupuesto personal o familiar, también en el ámbito de la administración por ejemplo, el déficit tiene lugar cuando los gastos o pagos son superiores a los ingresos o cobros.
Cuando el presupuesto se realiza para un organismo en cuya actividad desarrollada no hay ánimo de lucro, en vez de pérdidas que mencionaríamos para una empresa, se hace referencia también al déficit. En particular, se suele utilizar este término cuando se habla de la preparación del presupuesto de cualquier organismo público. También cuando se comparan los ingresos provenientes de los impuestos (fiscales) con los gastos.
Cuando se da la situación contraria al déficit, cuando en un presupuesto es mayor la suma de los ingresos que la de los gastos, hablamos de superávit.
En Finanzas para Mortales hemos preparado una herramienta para facilitarte la elaboración de tu presupuesto personal o familiar, además te lo podrás descargar en Excel.