DIVIDENDO

Es el reparto que se hace de las ganancias (beneficios) que tiene una sociedad (empresa) entre sus propietarios (accionistas). Normalmente tiene carácter periódico.

La cantidad monetaria que se recibe en forma de dividendo se calcula dividiendo el dinero que la sociedad quiera repartir entre el número de acciones en que esté dividido el capital social. Esta cantidad se deberá aprobar en la asamblea o junta de accionistas, aunque existen unas limitaciones recogidas en la Ley de Sociedades de capital 1/2010. Esta ley obliga a que una parte del beneficio se destine obligatoriamente a reservas (autofinanciación) hasta una cierta cantidad, por lo que no todo el beneficio de la empresa se puede repartir en forma de dividendos. El reparto de dividendos es muy común en las empresas que cotizan en bolsa.

Existen varios tipos de dividendos:

  • Único: aquel que se abona en un solo pago y corresponde con los resultados (beneficios) del año anterior.
  • A cuenta: es aquel que se abona en función de los resultados del ejercicio presente, pudiendo optar las empresas por facilitarlo en uno o varios pagos.
  • Complementarios: se paga a final de año, una vez repartidos los dividendos provisionales.
  • Extraordinario: surge como consecuencia de algún hecho extraordinario, como por ejemplo la venta de una filial o la parte de una empresa. Este tipo de dividendo no se repite con el paso de los años.
  • Una nueva modalidad, en donde se ofrece la posibilidad de cobrar los dividendos en forma de nuevas acciones de la compañía para el inversor.

Además de esta clasificación, los dividendos se pueden distinguir entre:

A la hora de contabilizar los dividendos en las finanzas personales, éstos se tratarán como si fueran un ingreso.