OPV

Siglas para Oferta Pública de Venta. Operación bursátil por la que una empresa pública o privada, pone a la venta parte o la totalidad de sus acciones, obligaciones o pagarés. Los gobiernos utilizan este mecanismo cuando quieren privatizar alguna sociedad pública.

 

Este tipo de operaciones lo suelen utilizar las empresas que cotizan en Bolsa como vía de financiación.

Existen dos tipos de OPVs:

  • OPV de acciones no cotizadas: son acciones de empresas que deciden, por primera vez, cotizar en bolsa. Para esto es necesario una solicitud de admisión previa.
  • OPV de acciones cotizadas: uno o más accionistas mayoritarios ponen a la venta acciones de una empresa que ya cotiza en bolsa.

En el caso de las empresas que cotizan por primera vez en bolsa se suele hablar de oferta Pública Inicial, en lugar de oferta Pública de venta. Para esta empresa, los trámites de colocación de las acciones suelen ser más complicados, ya que al ser primeriza en la bolsa el mercado aún no conoce la suficiente información sobre la misma, por lo que la incertidumbre puede dar lugar a que el riesgo sea mayor.

Cuando se trata de una OPV de una empresa que ya cotizaba en bolsa anteriormente, su procedimiento suele ser menos complicado que en el caso anterior, debido a que el inversor ya conoce esta empresa y su funcionamiento. El precio de cotización de las acciones de estas empresas en una OPV suele ser muy similar al que ya estaban cotizando en bolsa en ese momento, por lo que su riesgo, por lo normal, es menor. De cara a la correcta información a los inversores, las empresas que decidan realizar una OPV deben emitir un folleto informativo. Este folleto debe contener:

  • Información sobre los valores ofrecidos, por ejemplo su precio y rentabilidad, así como el régimen fiscal aplicable a ellos
  • Descripción de esta colocación, como por ejemplo los plazos y el sistema de adjudicación
  • El domicilio social, la fecha de constitución y otros datos sobre la empresa emisora de las acciones (patrimonio, etc.)

Las acciones emitidas en una OPV van dirigidas tanto a inversores particulares, o “tramo minorista”, como a empresas o instituciones financieras, más conocido como el “tramo institucional”. La CNMV (Comisión Nacional del mercado de valores) exige a las empresas emisoras que anuncien con antelación qué porcentaje va destinado al tramo minorista y cuál va dirigido al tramo institucional. El precio de las acciones se fija por un grupo de banqueros (agente colocador) encargados de promover las acciones entre los inversores.