ESPECULACIÓN

Es la compra de productos o servicios, de manera puntual o momentánea, con la intención de revenderlos y así obtener beneficios únicamente por la fluctuación del precio, sin involucrarse en la salud o viabilidad del mercado a largo plazo. Tiene una connotación negativa.

Una operación especuladora no busca participar en el mercado de manera que se generen beneficios tanto para los productores como para los consumidores, y los intermediarios, sino que busca aprovecharse del control momentáneo de algún bien o servicio para obtener un beneficio a través del control de su cantidad y su precio.

Las fluctuaciones de los precios pueden basarse en la teoría del arbitraje. Aunque toda forma de inversión pudiera ser especulativa, la falta de compromiso para crear mercado a largo plazo le otorga una connotación negativa a la especulación, porque aquella inversión que no conlleva ninguna clase de compromiso con la creación y gestión de los bienes en los que se invierte, limitándose a buscar un beneficio inmediato y momentáneo suele desestabilizar al mercado en su conjunto.