La tarjeta de débito es una tarjeta bancaria que está siempre vinculada a una cuenta corriente.
Sirve para diferentes usos que pueden realizarse a través de cajeros automáticos, banca online o dispositivos TPV, en los que pagamos acercando o insertando la tarjeta.
La operativa que permite una tarjeta de débito es variada; sacar dinero, ingresar en cajeros, mirar los movimientos de la cuenta, realizar transferencias, comprar en comercios o de forma online, etc.
En los cajeros siempre se te pedirá la clave, en los TPV en función de la cantidad es posible que también, y siempre deberás utilizar tus credenciales para las compras online.
Todo esto es posible llevarlo a cabo con una tarjeta de débito siempre que tengas dinero en la cuenta corriente y las compras no superen el saldo disponible, ya que la entidad bancaria realizará el pago de forma inmediata.
En función de la entidad, de las condiciones de tu cuenta, y de lo que utilices la tarjeta, puede ser que te cobren comisiones.
